Estas dos fotos nos las envía un vecino del Puerto, según me dice, una de las muchas personas afectadas por la construcción de trece chalets adosados en primera linea de acantilado entre las calles Satistegi y Ribera, en pleno Puerto Viejo de Algorta. Las antiguas viviendas se encuentrn a escasos centímetros, metros, de los nuevos chalets que se están construyendo, tanto que si tose uno, escupe al vecino, la ventaja es que no hará falta salir de casa para pedir sal o azúcar, sacas la mano por la ventana y solucionado.
Siempre nos hemos solidarizado desde este blog con todas esas familias que disponían de unas viviendas que 'respiraban' y que el ladrillazo chaletón va a ahogar, a asfixiar,... ya no hay marcha atrás, el ayuntamiento ha permitido esta barbaridad, pero nosotros seguimos apoyándoles y sí, consideramos que aunque nuestras casas tradicionalmente están muy juntas la una de la otra, lo que no se puede hacer es en vivienda nueva, y solo para ganar metros construidos, escudarse en una tradición para oprimir al vecino indefenso.
1 comentario:
Glups, que putadón. Pobre gente.
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